Balbino Lozano
La Iglesia Católica celebra, cada 15 de agosto, la festividad de la ASUNCIÓN DE LA VIRGEN MARÍA a los Cielos.
La Iglesia Católica celebra, cada 15 de agosto, la festividad de la ASUNCIÓN DE LA VIRGEN MARÍA a los Cielos.
El Cuerpo y el Alma de la Virgen María fueron llevados al Cielo después de terminar sus días en la tierra.
Este es un dogma de fe proclamado por el Papa Pío XII el 1 de noviembre de 1950 "Assumptio Beatae Mariae Virginis", aunque la Asunción de la Virgen María a los Cielos se viene conmemorando desde el Siglo VI en la Iglesia de Oriente y desde el Siglo VII en Roma .
Los zamoranos llamamos a esta transición de la Virgen el Tránsito y por ello, para nosotros, es la VIRGEN DEL TRÁNSITO.
Son muchas las familias de esta tierra que practican especial devoción a esta advocación de la Madre de Dios.
Durante los días del Novenario acuden al templo verdaderas multitudes de personas devotas a la VIRGEN DEL TÁNSITO.
Hay una bonita leyenda sobre la zamorana Virgen Dormida: Se cuenta que el 2 de mayo de 1618 llegaron al Convento dos peregrinos que venían de Compostela y saludaron a la Madre fundadora de la Congregación, Sor Ana de la Cruz, desarrollándose los hechos en los siguientes términos:
"Guarde Dios a los piadosos romeros que han tenido la dicha de orar delante del sepulcro del Santo Apóstol.
- Derrame el Cielo sus bendiciones sobre la santa hija de D. Carlos de Borja, duque de Gandía
- No soy más que una pobre pecadora y religiosa indigna ¿Qué demandan los tristes peregrinos al silencio de esta mansión?
- Santa madre, dijo uno de los romeros, ha llegado a nuestra noticia el deseo que os inquieta. Sabemos de vuestro anhelo por poseer una imagen de María Santísima en su glorioso tránsito a los cielos y venimos dispuestos a hacerla tal y tan hermosa que sea el pasmo de las futuras generaciones.
Atónita la madre replicó:
- ¿Cómo puede ser eso? ¿Cómo habéis desenvuelto los pliegues de mi pensamiento? A nadie más que a mis religiosas lo he comunicado.
- Vuestro pensamiento burló el espesor de los muros de este convento y llegó a nuestros oídos; el cómo fue ¿Que interesa? dijo con voz dulce uno de los peregrinos; diestros somos, dejad recelos y poseeréis lo que tanto deseáis-
- ¡ Ah ! dijo la abadesa, de vuestra destreza no dudo, pobres somos ¿Cómo premiar vuestro trabajo?
- Gracia haremos; no somos avaros, nuestro afán será llenar vuestro gusto
- Así lo espero; pero antes decidme ¿En cuánto apreciáis vuestra obra?
- No será sin que antes quedéis de ella satisfecha. Somos completamente desconocidos en la ciudad, por lo que serviréis concedernos una cuadra dentro de clausura donde poder terminar nuestro empeño; hecho esto si os agrada entraremos en ajuste, quedando de este modo vos complacida y nosotros satisfechos..
La Madre Ana introdujo a los peregrinos en una cuadra la mas interior del convento y en la que después se edificó la modesta capilla que guardó la Santa Imagen, poniendo dos hombres que los acompañaran, pero los peregrinos rogaron que los dejasen solos, como así lo hicieron, no sin echar a la puerta los pestillos y los pasadores.
Pasaron horas y horas hasta que habiendo dado las cinco de la tarde, impacientes las religiosas y con pretexto de llevar algo de comer a los romeros, se dirigieron a la puerta que abrieron enseguida, y ¿ Cual no sería su admiración al hallarse con la Sagrada Imagen tal y tan hermosa cual no puede imaginarse?
Postrada la Comunidad, entonó el Ave María y cuando se terminó tan `piadoso canto, echaron de ver que los romeros habían desaparecido."
Tal es la procedencia, devoción, historia y costumbres que a esta Señora en su Tránsito glorioso ofrece anualmente Zamora.
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